Generatividad: el cuidado de la sabiduría entre generaciones
Como cada mes, desde la residencia San Antonio de Benagéber nos llega un texto que nos puede ayudar a pensar y reflexionar sobre las personas mayores.
La generatividad es uno de los conceptos más positivos y valiosos para las personas mayores. Hablamos de generatividad cuando nos referimos al saber compartido, a la capacidad de transmisión de sabiduría de una generación a otra.
Es un concepto que está relacionado con el bienestar psicológico y que facilita el autoconcepto, el dominio del ambiente y las relaciones positivas con los demás y su entorno. Además contribuye a tener un propósito de vida, el crecimiento personal y el favorecimiento de la autonomía.
En la última etapa de la vida, la generatividad se va acumulando, gestando y forma parte de la sabiduría que caracteriza a las personas mayores. Debemos desarrollar y apoyar el deseo generativo de las personas mayores, ya que cada persona tiene la capacidad de dejar un legado vinculado con sus valores, creencias, costumbres, sobre lo vivido, lo aprendido, y también sobre la sabiduría generada durante su trayectoria vital.
Las personas tenemos la capacidad de transmitir a otras lo vivido. Las generaciones futuras son las mejores receptoras de dicha sabiduría. Por esta razón, los proyectos intergeneracionales son lazos construidos entre niños y niñas, personas jóvenes y adultas con las personas mayores, que de una forma silenciosa generan bienestar en la comunidad a la que pertenecen. Hay un valor innato que nos dan los años y es el interés por guiar y asegurar el bienestar de las siguientes generaciones. En la relación de ayuda y compromiso social que el voluntariado crea con las personas mayores debemos tener en cuenta la generatividad, para ponerla en valor. Es esencial facilitar que las personas mayores nos ayuden y que puedan expresar su interés por perpetuar conocimientos y valores en las futuras generaciones. Puede ser la clave del envejecimiento satisfactorio.
Las personas mayores socialmente están vinculadas de una forma genérica con las situaciones de dependencia, con la falta de autonomía, con las pérdidas a nivel de salud, de movilidad y de memoria, pero debemos recapacitar respecto a lo que las personas mayores nos dan, ponerlo en valor y así, socialmente, cambiar en positivo su imagen.
Es nuestro compromiso favorecer, mantener y reforzar sus vínculos familiares y sociales. En la Residencia de Mayores de la Fundación San Antonio de Benagéber y con el objetivo de aumentar su generatividad, desarrollamos proyectos intergeneracionales con los colegios próximos a la Residencia con colegios vinculados como el de las Escolapias de Valencia, con el voluntariado joven de Cáritas y con el voluntariado adulto. Os animamos a crear, facilitar y posibilitar, si está en vuestras manos, la sabiduría de las personas mayores.
Amparo Ruíz es trabajadora social y Daniela Miranda, técnico superior de Animación Sociocultural de la Fundación San Antonio de Benagéber.
