Fundaciones25/11/2019

Mitos sobre las adicciones

Artículo mensual de los compañeros de Proyecto Hombre Valencia para conocer la realidad de las adicciones.

Los mitos forman parte del sistema de creencias de una cultura o comunidad, la cual los considera verdaderos. En la actualidad estas creencias se están alimentando con multitud de ideas irracionales, que se expanden a gran velocidad ayudadas por las TIC. Sean antiguos o modernos, los mitos siempre se apoyan en tres puntales.
  • cumplen un objetivo, justificar conductas y argumentos;
  • tienen un proceso de construcción, cada vez más rápido;
  • se apoyan en símbolos, cuanto más arraigado este el símbolo, más facilidad tendrá para arraigar el mito.
Veamos algunos de esos mitos, o bulos, en las adicciones y sus sustancias.
 
«Es adicto quien quiere»
“Cuando sientas deseos de criticar a alguien, recuerda que no todo el mundo ha tenido las mismas oportunidades que tú tuviste”. Así comienza la mítica novela, el Gran Gatsby y la frase es trasladable a las adicciones. Las oportunidades de las que habla no solo son factores de protección, también pueden serlo de riesgo. La disponibilidad, la familia, el entorno social, las vivencias, la educación, la genética y otras variables, van a favorecer la adicción o la abstinencia y entre medias, un inmenso abanico de opciones. Antes de hacer cuestionamientos morales, hagamos el esfuerzo de ponernos en los zapatos del otro. 
 
«El porro es natural»
Ni es natural ni lo natural es necesariamente sano.
No es natural porque se han realizado selecciones genéticas para potenciar los principios más tóxicos de la planta. Además, lo natural no es necesariamente sano, tenemos ejemplos en todos los reinos de la naturaleza.
Tampoco es más sano el porro que el tabaco. Además de tener más sustancias toxicas, favorece que lleguen en mayor concentración a los pulmones.
 
Por otra parte, múltiples estudios científicos, encuentran cada vez mayor relación entre el consumo de cannabis y ciertas enfermedades mentales, sobre todo durante la adolescencia.
 
«El que tiene una adicción es peligroso»
Bajo los efectos de las sustancias psicoactivas, se distorsiona la realidad, lo que puede generar conductas irresponsables e incluso violentas.
La prensa se ha hecho eco de casos aislados creando una sensación de generalización que no se corresponde con lo habitual. Lo cierto es que el peligro de las adicciones lo sufren sobre todo los adictos. Los que le rodean sufrirán muchas cosas, pero la violencia no es la más habitual.
 
«La adicción al juego es cosa de personas mayores»
La imagen que tenemos de la ludopatía clásica, de casino y timba, se centra en población adulta. Pero en la actualidad, con la legislación sobre juego a través de Internet y su gran difusión publicitaria, los jóvenes y adolescentes son los principales consumidores, puesto que ellos ya jugaban en internet e incorporar las apuestas a su abanico de aficiones, ha sido casi natural. Las situaciones problemáticas, de abuso y dependencia, se han creado con rapidez, y la población más joven está destacando en la adicción al juego a través de Internet.
 
Son muchos los mitos en torno a las adicciones y sus sustancias.
 
Los mitos solo generan desinformación y confusión, muchas veces interesadas, mantenidas desde la publicidad y favorecidas por una legislación laxa o confusa.
 
La información verídica y contrastada es cada vez más necesaria y no la comodidad del titular llamativo o que me resulta agradable por reforzar mis ideas. Pero no solo la información sino la educación, verdadera herramienta de prevención desde la que se pueden crear estilos de vida que primen la salud, educación en la que, todos tenemos un papel.