La segunda del nuevo siglo es una década marcada por muchos cambios significativos del trabajo de Cáritas en favor de las personas que acompañamos, aquellas que sufren la exclusión y vulnerabilidad de sus derechos. Cáritas ha estado y seguirá estando a su lado, implementando acciones y proyectos dirigidos a mejorar su calidad de vida.
La gran crisis de refugiados provenientes de Siria y la generada tras la enfermedad de la COVID-19 mostraron el lado más sensible y solidario de la sociedad valenciana. La presencia del voluntariado, como en tantos momentos, se muestra fundamental por su cercanía hacia quienes sufren soledad, injusticias, hambre…
Se trata de una década marcada por el impulso y la creación de programas y proyectos, entre los que destacan el programa diocesano de empleo; la consolidación de Mambré como centro socio-ocupacional para atender de forma global a personas en situación de sin hogar, migrantes y mujeres en contexto de prostitución y trata; la puesta en marcha de un centro para que personas sin hogar puedan pasar la noche en los meses de frío; la apertura de un hogar para menores migrantes; la creación del programa de intervención familiar en el hogar; del observatorio diocesano de la realidad; la participación de jóvenes en el campo de trabajo en Palestina…
La lucha contra la pobreza y la apuesta por trabajar la dignidad y el derecho de acceso a la alimentación de las personas en situación de mayor vulnerabilidad han hecho posible proyectos parroquiales promocionales como las tarjetas solidarias.
La caridad se rejuvenece. Los últimos años de la década han surgido iniciativas solidarias de la mano de jóvenes de entre 16 y 30 años, con acciones destinadas a fomentar el compromiso y la transformación social.
Gesto por los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
Sede de Cáritas Diocesana, València. 2012.
Participación del Programa Jere-Jere en la Semana de la Dona.
València, 2014.
Inauguración de los nuevos locales de Mambré.
Torrefiel, València. 2015.
Migrantes acogidos por Cáritas en la Falla denuncia.
València, 2016.
Campo trabajo de Iniciativa por la Paz.
Palestina, 2017.
Gesto en el Encuentro diocesano.
Escuelas San José, València. 2018.
Componentes de la Cáritas parroquial
en un Mercadillo solidario.
Xaló, 2017.
Hogar Mare de Déu dels Desemparats i dels Innocents.
Torrent, 2019.
Entrega de mascarillas en el hospital
elaboradas por voluntarias de la Cáritas parroquial.
Benaguasil, 2020.
Centre de Nit San Esteban.
València, 2020.
Proyecto Jóvenes con Corazón y Encuentro de jóvenes de la Vicaría VIII.
«Este contexto ayuda a comprender el valor de la parábola del buen samaritano: al amor no le importa si el hermano herido es de aquí o es de allá. Porque es el «amor que rompe las cadenas que nos aíslan y separan, tendiendo puentes; amor que nos permite construir una gran familia donde todos podamos sentirnos en casa. […] Amor que sabe de compasión y de dignidad»».
Fratelli tutti, 62.
Papa Francisco
